¿Qué recuerdo debería llevarse de sus vacaciones en el País Vasco?
Tanto si se trata de un recuerdo para sí mismo como de un pequeño obsequio para amigos o familiares, aquí tiene una lista (no exhaustiva) de regalos y recuerdos típicos para meter en la maleta cuando se vaya de vacaciones de camping al País Vasco.
Una auténtica boina vasca
Si no puede resistirse a llevarse a casa un recuerdo que marque la pauta, sin duda querrá hacerse con una boina tradicional vasca. Antaño usada por los pastores de la región de Béarn y tejida con lana de oveja, la famosa boina de fieltro está disponible hoy en una amplia gama de estilos, desde el más clásico al más a la moda. Pruébelo y le encantará. ¿Una buena dirección? Fundada en 1830, Laulhère, en Oloron-Sainte-Marie, es el último fabricante francés que queda de la auténtica boina vasca.
Un par de alpargatas
Y no unas alpargatas cualquiera: ¡alpargatas fabricadas en Mauléon-Licharre, LA capital de la alpargatería francesa! Zapato estrella del verano, la alpargata vasca es robusta, chic y desenfadada. Está cosida a mano con materiales 100% naturales: lona de algodón en una amplia gama de colores y suela de yute tejido recubierta de goma. Un clásico atemporal
Un partido de pelota vasca
Cuando uno piensa en el País Vasco, inmediatamente piensa en la pelota vasca, un juego tradicional derivado del jeu de paume en el que los jugadores golpean una pelota contra una pared. ¿Y qué hay más típico que una pelota de cuero (de piel de búfalo o de cerdo de Oteiza) y un buen par de raquetas de madera (llamadas palas y paletas)? En su deambular, seguro que se topa con un taller de artesanía donde desenterrar un objeto raro, o un frontón donde probar su nuevo juguete.
Lino vasco
Si busca un recuerdo para alegrar su hogar, piense en la ropa vasca, para la casa, la mesa y el cuarto de baño. Antiguamente, el lino vasco era una tela de lino decorada con 7 rayas de colores (que representaban las 7 provincias vascas), utilizada para proteger al ganado del calor y los mosquitos. Hoy en día, el arte del tejido a la vasca se presenta en todas sus formas, y en algodón: manteles, servilletas, delantales, cortinas, cojines, colchas, bolsos, bolsas… En Espelette, Biarritz o San Juan de LuzDurante más de 100 años, la familia Lartigue y el taller Tissage de Luz han mantenido viva esta herencia, combinando la artesanía creativa con un enfoque moderno. ¡Ahora estás en problemas!
Productos locales típicamente vascos
Los veraneantes que quieran meter algo de sabor en sus maletas tienen mucho donde elegir… El pimiento de Espelette es sin duda el más vendido, pero también es fácil encontrar otras especialidades gastronómicas: jamón de Bayona, axoa de ternera, pudin ibérico seco, piperrada vasca, queso Ossau-Iraty, tarta vasca de cerezas, pan de especias Aïnhoa… Y la lista es interminable. También hay chocolate de Bayona, vinos tintos de Irouléguy y cervezas artesanales fabricadas en Hasparren.
Un recuerdo con una cruz vasca.
El emblema fuerte del País Vasco es la Cruz Vasca, conocida como el “lauburu” (cuatro cabezas). Esta cruz en forma de hélice formada por 4 ramas en forma de coma se encuentra en todas partes: en joyas (colgantes, pulseras, pendientes, anillos, gemelos, etc.), bordada en una servilleta, grabada en un cuchillo de pastor (el famoso Bakunadar) o en una Makhila (el bastón tradicional), en la marroquinería vasca, en imanes para decorar la nevera, en los famosos pañuelos rojos que se utilizan en las fiestas, y en muchas otras cosas. En resumen, ¡absolutamente in-con-tour-nable!